lunes, agosto 29, 2005

K-bum!

Cosa extraña esta de los espejitos retrovisores. Cuando recién aprendés a manejar putear todo el tiempo diciendo cosas del estilo 'para qué carajo esán?' y es un estrés mirarlos, pero, cuando por fin te acostumbrás a usarlos (y te resultan útiles) y se te rompen por X razón decis 'por qué carajo los pusieron ahí afuera donde les puede pasar cualquier cosa?'.

Cómo sé? Procedo a contarles. Iba yo a mi psicóloga (como todas las semanas), andando por Juramento y la vía y... y... apenas cruzo la vía, PUM! Un bondilero hijo de re-mal puta (que me disculpe la madre pero muy mal crió a su hijo) que, por lo visto, no podía esperar a que NO VENGAN AUTOS se metió en la fila de autos justo cuando yo tenía que pasar (y hubiera no avanzado pero, recuerden, que tenía autos atrás). Bueno, para hacer corta la historia el muy forro me cerró entre el auto de mi derecha y el mismo. Empezó bastante bien, bah, lo 'esquivé' (o algo así) al principio, pero con la parte de atras del bondi no pude y PUM, chau espejito. Por suerte no me raspó ni nada el auto, pero yo estaba como loca. Al toque dejé a una amiga que estaba llevando (justo se tenía que bajar ahí, se ofreció a quedarse pero le dije que no) y seguí manejando (se imaginarán como estaba) hasta que llegué a un lugar medio despejado y la llamé a mi vieja. Por suerte no se lo tomó mal, yo creí que me iba a matar, pero nop :). Me dijo que ahora tenía que seguir manejando porque lo peor que podía hacer era cagarme toda y buen, que ahora si voy a aprender y eso. Ahh... lo mejor de todo: fui directo a la psicóloga... Eso salió bien =P

P.D.: la pustísima línea en cuestión era la 144!!!!!!

1 comments:

At 1:02 p. m., febrero 05, 2007, Anonymous Anónimo me dijo...

Best regards from NY! »

 

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